El cardenal Jorge Mario Bergoglio, recientemente escogido como el máximo Jefe de la Iglesia
Católica, se encuentra finalizando hoy, en Río de Janeiro, Brasil, su primer viaje fuera del Vaticano. Me ha dejado
una excelente impresión, y mayor aún entre
la feligresía brasilera a quienes ha encantado y también entre los muchos
jóvenes de más de 170 países, de dicha
denominación que se encuentran celebrando su encuentro internacional de la
juventud (JMJ: Jornada Mundial de la Juventud). Desplegando vitalidad, pese a sus más de 70
años, simpatía, sensibilidad social, humildad y una sonrisa afable y acogedora,
se muestra como un auténtico seguidor de nuestro Señor Jesucristo, a tal
extremo que algunos enfervorizados devotos han creído ver a Cristo en su
persona. No cabe duda que dichas cualidades son algunas de las expresiones
visibles de quién ha entregado su vida
al señorío de Cristo, siendo su discípulo. Sin embargo, hay algunas cosas que
nos debieran llamar la atención a la luz de las enseñanzas de Jesús:
En Juan capítulo 8 podemos leer:
8:31 Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído en él: Si vosotros
permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos;
8:32 y conoceréis
la verdad, y la verdad os hará libres.
Y en el capítulo 14 Juan recoge también las siguientes expresiones de Jesús
14:21 El que tiene mis mandamientos, y los guarda,(*) ése es el que me ama; y el que me ama,
será amado por mi Padre, y yo le amaré, y me manifestaré a él.
14:23 Respondió
Jesús y le dijo: El que me ama, mi palabra guardará; y mi Padre le
amará, y vendremos a él, y haremos morada con él.
14:24 El que no me ama, no guarda mis palabras;
y la palabra que habéis oído no es mía, sino del Padre que me envió.
Teniendo presente estas expresiones de Jesús, es hora entonces de que
aprovechando su gran carisma y la rápida
influencia que ha conquistado en la curia y la feligresía romanista, el cura Jorge Mario Bergoglio denominado ahora Francisco
1ro. haga honor a las enseñanzas y palabras de
Jesús (de quien Roma le atribuye
ser su representante en la tierra) y promueva una gran reforma al interior de
la Iglesia Católica si quiere de verdad
que quienes la integran lleguen a ser genuinos cristianos (término que, aunque
parezca de Perogrullo, significa, seguidor de Cristo). Ello porque el romanismo
no da el ancho en cuanto a que ha
privilegiado formulismos humanos por sobre los profundos preceptos enseñados
por Cristo.
Basado en los versículos ya mencionados, tomemos para muestra algunos ejemplos:
Mucho se habla de la infalibilidad del Cura que preside el Vaticano en
cuanto enseña “ex cátedra”,
constituyéndose entonces en el maestro por excelencia del pueblo católico, sin
embargo lo que más contradice las enseñanzas de
Jesús, es el trato de “Santo Padre” que tanto la curia como la
feligresía y aún otros le brinda. Ya el nombre del cargo “Papa”, que viene del
griego pappas, nos dice que significa padre. Pero ¿qué dijo Jesús al respecto,
(sin duda sabiendo lo que acontecería siglos después de su primera venida)?
Leamos las enseñanzas de Jesús en Mateo capítulo 23 en los versículos que
se indican:
23:8 Pero
vosotros no dejéis que os llamen Rabí; porque uno es vuestro Maestro y todos
vosotros sois hermanos.
23:9 Y no llaméis a nadie padre vuestro en la tierra; porque uno es vuestro Padre, el que está en los cielos.
23:10 Ni dejéis que os llamen preceptores; porque uno es vuestro Preceptor, Cristo.
23:9 Y no llaméis a nadie padre vuestro en la tierra; porque uno es vuestro Padre, el que está en los cielos.
23:10 Ni dejéis que os llamen preceptores; porque uno es vuestro Preceptor, Cristo.
23:11 Pero el
mayor de vosotros, será vuestro servidor.
Aquí Jesús no se está refiriendo al trato filial de los hijos hacia su
padre, ni del alumno a su profesor, sino que lo que condena Jesús, es el trato de padre o maestro exigido como reverencia o
reconocimiento de un estatus superior, o exclusivo. Pero el trato de padre, entre
los católicos se extiende también desde el papa hasta los simples párrocos, a
quienes se les da el trato de “padre” o “padrecito”, y en el caso del primero
de “Santo Padre”. ¿No habrá llegado la hora para los católicos de “guardar”
estas enseñanzas? Pero parece que por siglos han interpretado que este
“guardar” equivale a archivar o esconder en un lugar seguro donde nadie se acuerde
de ellas. Estimado lector, recuerde Jesús dijo: “el que me ama, mi palabra
guardará…” esto es, atesorará en lo profundo de su ser para vivirlas o vivenciarlas, para ser enseñado y corregido
por ellas.
Otra muestra que me llamó grandemente la atención
fue la conducta de Francisco 1ro. (toda
conducta de un máximo líder tiende a ser imitada por sus seguidores, por tanto
sirve de ejemplo) en cuanto al amplio
culto o reverencia a imágenes tan difundido entre los católicos y
particularmente en el catolicismo brasileño.
Y aquí pudimos ver al máximo líder Católico reverenciando a la imagen de
la llamada “Señora Aparecida” una estatuilla
de mujer de color negro, que al
parecer habría “aparecido” en forma casi sobrenatural en algún lugar a la vera
del río Paraiba hace casi 300 años, (próximo año 1917, se cumplen 300 años de
su “aparición”), pasando a constituirse en la “padroeira”, esto es, patrona del
pueblo católico brasileño. También me llamó la atención que a su paso por las
calles de Copacabana, anteayer, el día viernes 26 de Julio, Francisco 1ro. mandó parar el “papa móvil”
para poder bajar y bendecir una imagen de San Francisco. Esto, en abierta contradicción a los
mandamientos, en particular a aquél que dice “no te harás ídolo, ni semejanza alguna de lo que está arriba en el
cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas, ni debajo de la tierra. No los
adorarás ni los servirás…” Éxodo 20:4,5.
Que dice Jesús al respecto:
Mateo
5:19 De manera que cualquiera que quebrante uno de estos mandamientos muy
pequeños, y así enseñe a los hombres, muy pequeño será llamado en el reino de
los cielos; mas cualquiera que los haga y los enseñe, éste será llamado grande
en el reino de los cielos.
Saquemos lecciones de estos acontecimientos, de
modo que no nos ocurra lo que Cristo dice para algunas iglesias en Asia menor
(léase Apocalipsis capítulos 2 y 3) “Pero
tengo unas pocas cosas contra ti…,
…por tanto, arrepiéntete…” O
bien “Ponte en vela y
afirma las cosas que quedan, que estaban para morir, porque no he hallado
completas tus obras delante de mi Dios. Acuérdate, pues de lo que has recibido,
guárdalo y arrepiéntete. Por
tanto si no velas, vendré como ladrón, y
no sabrás a qué hora vendré sobre ti”. Ap.
3:2,3. Sobran los comentarios
ante la claridad de estas palabras.
Espero que los hermanos católicos reciban estas reflexiones no como una
crítica sino como una oportunidad para perfeccionar nuestra relación con
nuestro Creador por medio de las enseñanzas recibidas de nuestro Señor
Jesucristo.
Rescato las palabras de Francisco 1ro, hablando a
los jóvenes en la vigilia de ayer sábado
“dejen que las palabras de Cristo crezcan en sus vidas” refiriéndose a
que debemos ser la buena tierra que recibe la semilla (la palabra de Dios) que da mucho fruto.
Si
queremos reflejar a Cristo en nuestras vidas, debemos pues honrar sus
enseñanzas, viviéndolas, de modo
que los demás puedan reconocer que en
verdad hemos estado a los pies de Jesús, el verdadero Señor y Maestro para
recibir sus enseñanzas, guardarlas, y transformar nuestras vidas.
(*) El uso de negrita o cursiva en los textos
bíblicos transcritos, es mía, a fin de resaltar aspectos del magisterio de Cristo para nuestras vidas. Los textos bíblicos usados han sido tomados
de la versión de Editorial vida y de la Biblia de las Américas.